El sector de los drones evoluciona sin límites y cada vez son más los usuarios que emplean las aeronaves no tripuladas con un sentido recreativo o profesional. La regulación del uso de este tipo de equipos se convierte, por tanto, en imprescindible. Para ello, en España contamos con la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), que define los requisitos mínimos de seguridad exigidos para volar drones.
Aunque ya existía una normativa anterior, en diciembre de 2017 entró en vigor el Real Decreto 1036/2017 que establecía las responsabilidades y obligaciones para el pilotaje de aeronaves no tripuladas. Para desglosar este nuevo reglamento es importante distinguir entre el uso recreativo de drones y el uso profesional. ¿Qué puedes hacer con tu equipo si lo utilizas en un ámbito o en otro? Lo analizamos en detalle.
Volar drones con uso recreativo
Lo primero que necesitas es contar con una placa de identificación de tu dron, que incluye datos sobre la aeronave y el operador o piloto. Este requisito, que antes solo era solicitado para los profesionales del sector, se ha extendido con la nueva normativa al uso lúdico. Eso sí, en este caso no necesitas contar con una licencia de piloto, aunque sí velar por la ley de protección de datos y evitar la difusión de imágenes privadas sin poseer autorización.
En cuanto a la tripulación en sí, tienes que pilotar tu equipo en zonas adecuadas y de día, a no ser que tu dron pese menos de 2 kg o no supere una altura de 50 m, caso en el que también puedes pilotar de noche. Independientemente a sus características, tu aeronave siempre tiene que estar a la vista y mantener una altura máxima de 120 m.
Respecto al seguro de tu equipo, no necesitas contar con uno como tal, aunque sí que debes hacerte cargo de los daños que ocasiones en caso de provocar un accidente. Por ello, en AXDRON recomendamos contar con al menos un seguro a terceros que cubra las incidencias.
Volar drones con uso profesional
De la misma forma que en el uso recreativo, para el uso profesional también necesitas una placa de identificación de tu dron. Pero los requisitos no solo afectan a tu equipo. Como piloto, debes estar habilitado por AESA y el RPAS, aviones controlados de forma remota. Y, por supuesto, respetar la anteriormente mencionada ley de protección de datos.
El “Equipo Pegaso” de la Guardia Civil
Para realizar un control exhaustivo del uso de aeronaves no tripuladas, la Guardia Civil creó en 2015 el “Equipo Pegaso”, unidad que desde entonces ha detectado numerosas irregularidades. Entre ellas, drones volando sin autorización o pistas clandestinas, según ha detallado Jorge Pacha, sargento jefe del equipo. Aunque, en realidad, la principal función del “Equipo Pegaso” es la prevención y concienciación ciudadana de los riesgos que conlleva volar drones.
